El sueño por ser jugadora de fútbol profesional es el camino que recorren las protagonistas de ‘13’, un planning lector fantástico. Andrea Menéndez Faya toma una realidad muy reciente para dar voz a una ficción excelente.
Por Cris | La profesialización del fútbol femenino se hacía realidad hace demasiado poco tiempo nuestro país, pero ha sido tan largo el camino. Desde aquellas mujeres que en la Inglaterra victoriana de 1894 fundaban el primer equipo femenino de fútbol de la historia o otras tantas españolas que se animaban a practicar este deporte en los años 40, la mujer ha quedado relegada a un segundo plano en cuanto a oportunidades y reconocimientos en esta disciplina. Ser futbolista ha dejado de ser un sueño para convertirse en la realidad de muchas niñas que soñaban con ser futbolistas.
En torno a este camino, y este sueño, – no retrocediendo tanto en el tiempo- se enmarca “13” (Editorial Planeta), una novela fantástica de la periodista Andrea Menéndez Faya, actual redactora jefe de la web Futboleras.es, medio de referencia del fútbol femenino español. Andrea toma una realidad muy reciente para dar voz a una ficción excelente.
Amistad, esfuerzo, pasión y un sueño de futuro
En «13» hay amistad, rivalidad, maduración, aceptación, esfuerzo y reconocimiento, y es que, sin lugar a dudas, es una novela 10/10 que cobra vida más allá de sus páginas. Andrea te traslada a una realidad no tan lejana en el grueso de la categoría femenina del fútbol. A través de una narrativa con destacadas y gustosas referencias futbolísticas, y un ritmo que la convierte en una lectura adictiva – sí, la hemos leído del tirón-, toma la historia de unas niñas que encuentran en el fútbol su escondite, su pasión y su sueño de futuro para cogernos de la mano y vivir junto a ellas ese camino de lucha, de crecimiento, de cambios y de verdad.
Junto a Raquel – la joven protagonista de «13», que tiene claro desde pequeña que quiere su futuro la lleve a ser una gran portera profesional – , y sus compañeras de equipo, equipos y de vida, la novela recorre el camino de estas jóvenes promesas del fútbol femenino – entendido cómo se entiende ahora- en la que los éxitos, los triunfos y las risas de todas ellas van de la mano de la ansiedad frente a la presión, la frustración ante las derrotas y las situaciones de abuso escolar que algunas vivieron, y consiguieron superar, y que aún no han dejado de sufrir otras niñas por el simple hecho de querer jugar a fútbol.
Es una lectura impregnada de frescura, sentimiento y verdad que enmarca perfectamente lo difícil que lo tuvieron las futbolistas para convertirse – sin pretenderlo – en referentes de las nuevas generaciones.