- El mito de Mammón o lo corrompible de la humanidad en los Teatros del Canal.
- Nao Albet y Marcel Borràs contruyen un juego escénico brillante aplicando un tema universal que sigue maltratando a miles de personas en todo el mundo.
- Puro disfrute de la mano de Nao, Marcel, Ricardo Gómez, Irene Escolar y Manel Sans.
Por Cris | ¿Qué es eso de «Mammón»? ¿De qué va? ¿Nos gustará? Sin saber muy bien, o muy nada, la respuesta a estas preguntas con acierto llegamos a tiempo de disfrutar de la propuesta teatral escrita y dirigida por Nao Albet y Marcel Borràs, un tándem de una creatividad apabullante.
El mito de Mammón, aquel con el que se aborda la capacidad corrompible del ser humano, es la premisa, que en principio, se sirve para abordar la cuestión de la actual Siria, un país tristemente inmerso en una de las guerras más crueles de nuestro siglo.
¿El resultado? Un planning de teatro que no solo es una experiencia fantástica, sino que lo es más ya que el disfrute sobrepasa toda expectativa (in)esperada. Nao y Marcel erigen un juego teatral disruptivo, trepidante, mordaz y de carácter sorpresivo que involucra al público manteniéndole bien pegado al relato del que están siendo testigos.
Empleando la narrativa en sus diferentes caminos, «Mammón» es una propuesta teatral magnánima en la que el full actoral empuja maduramente un texto que responde a toda cuestión previamente planteada: ¿la persona corrupta nace o se hace?
Un reflexión de la situación en Siria a través de un ingenioso y hábil discursodonde cada personaje de la historia está inteligentemente configurado. Una narración iniciada por Irene Escolar y Ricardo Gómez, dos actorazos que muestran una gran versatilidad de registros a lo largo del relato mitológico al que el público se adhiere desde el primer momento. Testigos y jueces, verdugos y títeres de una historia en la que los asistentes quedan partícipes a merced del juego en el que Nao, Marcel y un maravilloso Manel Sans completan los cinco mástiles que escenifican la facilidad de la corruptibilidad de la humanidad.
Sin duda, «Mammón» es puro disfrute que va más allá de lo que uno ve. Un plan excepcional que bien merece una larga y exitosa vida. Un verdadero imperdible.